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¿Qué son las emociones?

Las emociones son reacciones ante factores internos o externos, es por eso que es un proceso adaptativo, ya que da prioridad a la información relevante para la preservación de la especie, y para la supervivencia de la persona.

El cerebro para decidir lo que es relevante, usa el mecanismo de selección de información por el proceso emocional. Es por eso que el efecto de las emociones, es la alteración del ánimo, saca a la persona del estado habitual, impacta de manera agradable o desagradable. Las emociones nos organizan el entorno y experiencias, cambiando en función de las demandas del entorno, por la acción de experiencias personales y sociales.

Emoción y sentimiento no son lo mismo, el sentimiento es el resultado  de una emoción que se ve reflejado en un estado de ánimo. Es más duradero que la emoción, la emoción es pasajera.

Las emociones constan de 3 aspectos:

Fisiológico, reacción involuntaria a un estímulo.

Cognitivo, la información se procesa, se evalúa y tiene impacto en nuestra experiencia subjetiva.

Conductuales, provoca cambios en los gestos de la cara, el movimiento del cuerpo, tono de voz, etc. Toda emoción se manifiesta de alguna manera en el cuerpo, siempre.

Clasificación de las emociones:

Las básicas, que son las mismas para cualquier ser humano, sin importar raza, cultura o creencias; todas tienen un rol importante que cumplir cuando se manifiestan, veamos;

También se han identificado emociones secundarias; la vergüenza, culpa, satisfacción, frustración, gratitud.

Las emociones  se originan por  algún tipo de cambio en el mundo que nos rodea.

Comienzan de forma automática, provocan rápidamente cambios psicológicos, cambian la naturaleza de todo lo que nos rodea, como lo percibimos y el modo de pensar. Nos preparan para emprender algún tipo de acción, dan lugar a sentimientos personales, se disipan rápidamente, y nos ayudan a afrontar, a sobrevivir y a prosperar en la vida.

Desde el punto de vista cerebral, por ejemplo, ante la percepción de una amenaza, el cerebro más primitivo, el sistema límbico, puede emitir respuestas de lucha o huida, con el objetivo de mantenernos vivos, se activa la amígdala, enviando órdenes al hipotálamo para que ponga en marcha todas las hormonas, vísceras y músculos necesarios para la lucha o la huida. Así nuestras constantes vitales cambian al activarse el sistema nervioso simpático, aumentando la frecuencia cardiaca, la presión arterial, la frecuencia de la respiración, etc.

Las emociones no se pueden ocultar, en ocasiones no compartimos ciertos tipos de información o tratamos de ocultar los sentimientos generados por las emociones, con el fin de protegernos. La emoción que más expresamos es la ira, y la menos es la alegría, sin embargo nunca es posible ocultarlas, ya que como vimos antes, siempre se manifiestan de alguna manera y se hacen visibles y sensibles a sus consecuencias. Toda decisión incorpora una emoción, nos definimos como seres racionales, sin embargo, son las emociones la que nos dominan, en esencia somos el producto de nuestras emociones y de las hormonas. Las emociones positivas expanden nuestro pensamiento, ayudan a generar nuevas ideas, tomamos en cuenta distintas posibilidades, mientras que las negativas nos ayudan a tener un enfoque más claro, nos permiten examinar los detalles de una mejor manera.

Las emociones se contagian, es un principio de resonancia, no solo son sentidas por la persona, sino que son captadas por otra persona. El contagio emocional es real, veamos un ejemplo, en un grupo de amigos que se frecuentan con bastante regularidad, si uno del grupo empieza a ponerse obeso, es muy posible que otros amigos del grupo igual lo hagan, y el efecto tiene tres grados hacia atrás, los amigos de mis amigos también se pondrán obesos y los amigos de los amigos de los amigos igual situación tendrán; es el contagio emocional, en este caso por frecuencia de compartir momentos, entre más frecuentes sean esas convivencias, mayor contagio emocional puede darse.

En condiciones en las que el despliegue de recursos de atención es limitado, en el espacio o en el tiempo, la información emocional se prioriza y recibe acceso privilegiado a la atención y a la consciencia. No es posible evitarlo, somos el producto cotidiano de nuestras emociones y de las hormonas, lo de ser racional está por verse, no es tan cierta esa afirmación.

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