Blog, Cultura laboral

Empresas saludables

Según la organización Mundial de la Salud, (OMS), “la salud es un estado de bienestar total que incluye, bienestar físico, mental y social; y no la mera ausencia de enfermedad o trastornos, en el cual la persona, es consciente de sus propias capacidades, y puede afrontar tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”.

La Organización para la cooperación y el desarrollo, (OCDE), recientemente publicó estudio hecho en los 37 países miembros, el resultado de un estudio sobre la condiciones de los trabajadores de los países asociados, y la conclusión más preocupante y absolutamente realista de lo que acontece en nuestro entorno laboral, a nivel mundial, es que en los próximos 20 años, el 50% de la fuerza laboral de los países miembros padecerá de algún trastorno de conducta, llámese depresión, ansiedad, estrés crónico, bipolaridad, etc., esta es una muy mala noticia para la gran mayoría de la gente.

En este momento, según la Organización mundial de la salud, (OMS), hay un 20% de la gente que trabaja que odia su trabajo, un 50% no se siente a gusto con lo que hace en su trabajo y solo un 20% disfruta lo que hace laboralmente. Esto es triste y muy preocupante, evidentemente la salud emocional está muy deteriorada.

El origen de la palabra trabajar, viene del latín, “tripaliare”, que hace referencia al “tripalium”, elemento de tortura de la edad media, compuesto por 3 palos en los que se ataba a los esclavos para azotarlos.

La palabra negocio, viene del latín, “negotium”, con la negación “nec” y el sustantivo “otium”, que ambos quieren decir, lo que no es ocio.

La sociedad se ha desarrollado alrededor del concepto del trabajo, como una de las formas de vida más frecuentes para poder estar insertado en la sociedad y poder suplir las necesidades básicas como las fisiológicas, las de seguridad y las sociales. Toda la cultura de los pueblos ha girado en torno a este concepto, aprender a trabajar, y esto ha desarrollado fuertemente otro concepto, el de competir. La educación en general, nos prepara para trabajar y competir, dejando de lado algo tan importante como la espiritualidad y la gestión de las emociones.

Si en la media mundial pasamos cerca de 90 mil horas de la vida productiva trabajando, lo que en nuestro país de hecho es mucho más, ya que según estudio reciente, Costa Rica es el país que más horas trabaja por habitante, pero es el que menor productividad tiene por hora, así que es muy posible que sean más de 90  mil horas laborales las que pase de su vida en el trabajo. Esto es más de un tercio de la vida media del tico.

La buena noticia es que ya se está dando viraje a esta situación laboral, en Europa hay una corriente fuerte hacia la búsqueda de un mayor bienestar emocional de la gente en las empresas, con el soporte de muchísima evidencia científica, de que esto trae mucho mayor productividad, mejor comunicación, más motivaciones, menos ausentismo por enfermedad, mayor estabilidad de tiempo en la empresa, mayor innovación y al final, mayor rentabilidad de la empresa. Lo que han buscado los empresarios por más de un siglo, mayor rentabilidad y eficiencia, por medio de la presión laboral, del estrés agudo y hasta crónico, dejando de lado necesidades de autoestima y de realización personal,  como un común denominador para una mayor rentabilidad, hoy se sabe que por ese camino no es posible seguir, dado que lo que se ha estado logrando es enfermar a la fuerza laboral y por ende a la sociedad.

Una empresa saludable empieza por buscar el bienestar, físico y emocional de la gente en toda la organización, por armonizar los valores de la empresa y los de los empleados, siendo el foco el bienestar psicosocial el más relevante a cuidar.

Tradicionalmente, la psicología de la salud ocupacional se ha orientado al estudio de las consecuencias negativas del estrés laboral, pero otras corrientes   se ha decidido por abordar el tema desde la perspectiva positiva, más en lo que funciona y dejando de lado las disfunciones.

Una empresa saludable es la que realiza esfuerzos sistemáticos, planificados y proactivos para mejorar la salud de sus empleados mediante buenas practicas, relacionadas con la mejora de las tareas, el ambiente social y la organización, (Salanova y Schaufeli).

Toma mucha relevancia en esta etapa transformadora, el salario emocional, el que hace referencia a lo que de verdad motiva e impulsa a todo trabajador, la satisfacción de necesidades más altas de la pirámide, las de estima y realización, el salario económico se encarga de cubrir las necesidades más básica de la pirámide, lo que ha sido el foco hasta ahora en la historia del desarrollo del trabajo.

En síntesis, la generación de un clima positivo, con adecuadas dosis de reconocimiento, de agradecimiento, de compromiso, de autonomía, con una comunicación fluida y efectiva, con capacidad de desaprender y reinventarse, abocan por obtener lo mejor de todas las personas que integran la organización, y por ende, incrementar el rendimiento y la productividad.

Para finalizar cito a Terencio, “ comete un gran error la gente que cree que la autoridad forjada en el rigor más puro, es mejor que la autoridad fundada en el cariño, porque este segundo es el que genera respeto y compromiso con los resultados”.

Comer, vivir, ser feliz
Conversación con la doctora en psicología Michelle Gillen, certificada en Mindfulness para el control del estrés